¿Qué protector solar necesito? Guía para elegir la fotoprotección adecuada
El verano nos trae luz, vida… y también la necesidad urgente de proteger la piel. Pero no todas las pieles necesitan lo mismo. Elegir una fotoprotección adecuada no es solo cuestión de SPF, sino también de historia clínica, sensibilidad cutánea y contexto dermatológico.
¿Qué factores tener en cuenta a la hora de elegir fotoprotector?
Tipo de piel: seca, grasa, sensible, reactiva… cada una responde mejor a ciertas texturas.
Fototipo: las pieles claras necesitan más protección y reaplicación frecuente.
Edad y condición dermatológica: pieles maduras, con antecedentes de lesiones, manchas o tratamientos deben usar filtros avanzados.
Exposición prevista: no es lo mismo una caminata de 15 minutos que pasar horas en la playa.
Piel con queratosis actínica o riesgo oncológico: fotoprotección médica
En casos de queratosis actínica (lesiones precancerosas producidas por daño solar crónico) o en pacientes con antecedentes de cáncer de piel, la elección del fotoprotector no puede ser aleatoria.
Isdin Eryfotona AK-NMSC Fluid SPF100+ está formulado específicamente para este perfil: contiene filtros UVB/UVA de amplio espectro, un SPF muy alto (100+) y DNA Repairsomes®, enzimas reparadoras del ADN que ayudan a reducir el daño celular acumulado.
Es el aliado diario para proteger, reparar y prevenir. Ideal tras tratamientos dermatológicos, cirugías cutáneas o como fotoprotección de uso crónico en pieles con alto riesgo.
¿Y si solo tengo la piel sensible o reactiva?
Para quienes buscan una protección alta, efectiva y respetuosa con la barrera cutánea, una excelente opción es la Cerave Loción Facial SPF50. Está enriquecida con ceramidas, niacinamida y ácido hialurónico, por lo que además de proteger, hidrata y calma.
Su textura ligera la hace ideal para uso diario, bajo el maquillaje o como parte de la rutina matutina. Es no comedogénica, sin perfume y desarrollada junto a dermatólogos, lo que la convierte en una gran aliada para pieles exigentes.
Consejo final: la mejor protección es la que te pones cada día
Un protector olvidado en el fondo del neceser no protege a nadie. Por eso, lo más importante es elegir una fórmula que se adapte a tu piel, estilo de vida y necesidades médicas. Porque no hay dos pieles iguales… pero el sol sí nos afecta a todos.
Deja un comentario
Inicia sesión para publicar comentarios